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IL POSTINO

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miércoles, 3 de marzo de 2010

DOMA DE LA PASIÓN

Año de la celebración del Mundial de Fútbol en Sudáfrica, se procede a quitar el velo a los diálogos traídos con la miniserie Shaka Zulu, que fue realizada cuando el apartheid seguía formando parte de la política del gobierno de Sudáfrica.

Capítulo 2

Shaka Zulu con gesto benevolente, y pensando en tomar ventaja, decide conservar en vida al viejo blanco que habla zulú.

Cuando los blancos entiendan que Shaka Zulu puede acabar al pueblo blanco, entonces les brindará su amistad.

El poder de los blancos tenía que ser mostrado a través de su hechicería llamada medicina, cuando el doctor cura a una mujer zulú con fiebre. La actitud ritual de cuidar a un enfermo grave es tomada como aplicación de embrujos para resucitar a los enfermos agonizantes. Aquí Shaka Zulu los prueba, mandará herir a la misma mujer zulú y les pedirá que la resuciten. El engaño del poder de la medicina de los blancos es enfrentada a un caso imposible, si son dioses los blancos que traigan a la vida lo que previamente Shaka Zulu ha condenado a muerte.

Honrando "El Corazón de las Tinieblas" de Conrad, el guión de la miniserie atribuye que un hombre sin escrúpulos puede fácilmente transformarse en un dios para los zulúes.

El miedo en Shaka Zulu es porque se le cree diabólico, y tiene brujos que lo aconsejan y le recuerdan las profecías y los augurios, así los brujos le aconsejan que no provoque a los antepasados buscando poderes que no le pertenecen. Desde el principio, colocan contra las cuerdas a Shaka Zulu, le inculcan que tenga miedo a esos desconocidos, le requieren que aborte su tentativa de saber que poderes traen. Shaka Zulu no temerá porque ellos visitan su Reino y puede dar orden de eliminar al grupo de blancos.

Los blancos se preguntan si pasaran a la historia, pero no saben si será a la historia contada por los zulúes o la historia contada por los blancos.

Tanto Shaka Zulu en su campamento repleto del ejército zulu, como los blancos montando diestramente los caballos, ambos quieren mostrar su poder, porque con ello quieren negociar. Así Shaka Zulu quiere que los caballos derroten a sus mejores corredores. No hay dificultad en que los poderosos caballos de los colonizadores se impongan victoriosos ante los corredores zulúes.

El Shaka se acerca, los blancos le hacen una reverencia, y dejan que monte uno de los caballos. Shaka Zulu realiza la doma del caballo, y puede hacerlo fácilmente, para los blancos es un aviso de que Shaka Zulu es valiente y sabe manejar las riendas.

Pide los lentes de un blanco y Shaka Zulu comprueba que ese hombre no quiere ver el mundo como lo que es. El Shaka sabe que los blancos juegan con las ilusiones, y le muestran un espejo y una caja de música. El colonizador venderá sus engaños mientras que los dominados soportarán esas ilusiones como si fuera la solución a su felicidad.

Shaka Zulu se comporta como el Rey de Inglaterra, ya que controla a sus súbditos cuando decide enviarlos a guerras.

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